El siguiente borrador es un documento que debemos dejar para el caso de que sufriéramos una desaparición definitiva ( o temporal, nunca se sabe...)
Su propósito es doble: por una parte, facilitar las cosas a nuestros allegados y por otra manifestar qué queremos que se haga con los elementos digitales que dejamos tras nosotros.
Es un documento privado, es decir: no haría falta, en condiciones normales, que lo firmaran testigos ni nada: bastaría con que le dijéramos a nuestros cónyuge, amigo, etc.: en tal cajón hay un sobre con un papel que dice qué quiero que hagáis con ciertas cosas.
Naturalmente: esto es un modelo general: que cada uno añada o quite o cambie lo que necesite.
Testamento digital
Firmado por [nombre] a tantos de tantos del 20**
Contraseñas generales
Contraseña de apertura del ordenador: ******
Correo Gmail: usuario ******, contraseña ******.
Acceso al banco (dirección ***): usuario ******, contraseña ******
Destrucción de contenidos
Quiero que se borren, sin que se mire el contenido, los siguientes directorios:
· Disco 1 (C:), subdirectorio ***: borrar íntegramente
· En el programa de correo Outlook: carpeta *** : borrar íntegramente
Destino de mis archivos
Una vez hechas estas dos cosas, lego el contenido de mi disco duro a la ciencia y la investigación (mensajes de correo incluido). Para el correo quiero un periodo sin que se toque de 15 años tras mi muerte
Blogs
Por favor: meted una nota en mis blogs diciendo que se acaba mi intervención (aunque me gustaría que permanecieran en línea).
Para ello hay que ir a Blogger: usuario: ******, contraseña: *****
Web
Idem de mi página web; me gustaría que quedara en línea. Para ello sólo hay que pagar al proveedor de alojamiento *** y renovar el dominio en el año 200**.
Más sobre este tema en el libro Manual de urbanidad y buenas maneras en la Red (Melusina, 2008) y en su blog.
Su propósito es doble: por una parte, facilitar las cosas a nuestros allegados y por otra manifestar qué queremos que se haga con los elementos digitales que dejamos tras nosotros.
Es un documento privado, es decir: no haría falta, en condiciones normales, que lo firmaran testigos ni nada: bastaría con que le dijéramos a nuestros cónyuge, amigo, etc.: en tal cajón hay un sobre con un papel que dice qué quiero que hagáis con ciertas cosas.
Naturalmente: esto es un modelo general: que cada uno añada o quite o cambie lo que necesite.
Testamento digital
Firmado por [nombre] a tantos de tantos del 20**
Contraseñas generales
Contraseña de apertura del ordenador: ******
Correo Gmail: usuario ******, contraseña ******.
Acceso al banco (dirección ***): usuario ******, contraseña ******
Destrucción de contenidos
Quiero que se borren, sin que se mire el contenido, los siguientes directorios:
· Disco 1 (C:), subdirectorio ***: borrar íntegramente
· En el programa de correo Outlook: carpeta *** : borrar íntegramente
Destino de mis archivos
Una vez hechas estas dos cosas, lego el contenido de mi disco duro a la ciencia y la investigación (mensajes de correo incluido). Para el correo quiero un periodo sin que se toque de 15 años tras mi muerte
Blogs
Por favor: meted una nota en mis blogs diciendo que se acaba mi intervención (aunque me gustaría que permanecieran en línea).
Para ello hay que ir a Blogger: usuario: ******, contraseña: *****
Web
Idem de mi página web; me gustaría que quedara en línea. Para ello sólo hay que pagar al proveedor de alojamiento *** y renovar el dominio en el año 200**.
Más sobre este tema en el libro Manual de urbanidad y buenas maneras en la Red (Melusina, 2008) y en su blog.
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