Si te gustan los tatuajes, seguro que eres de los que incluso te tatuas el nombre de tu chico o chica en el brazo o en un lugar que todo el mundo puede ver. Pero, puede suceder que con el tiempo ya no estéis juntos y desees borrar de tu vida incluso el nombre que te tatuaste con tanto amor o puede suceder que encuentres el trabajo de tu vida y no te permitan llevarlos.
Aunque no es fácil quitar un tatuaje, si que existen varias fórmulas y tratamientos, que todo hay que decirlo no son baratos, por ello se aconseja hacerlos de estos que puedan borrarse con el tiempo, los llamados henna.
A parte de costosas también pueden ser muy dolorosas. Razón por la que el henna hindú como alternativa al tatuaje convencional, es una opción que vale considerar, a la hora de tatuarse.
No obstante, si tienes un tatuaje y necesitas deshacerte de él, a cualquier costo, podrás optar entre diferentes alternativas. Para eliminar un tatuaje permanente recurre a alguna de las siguientes fórmulas:
- Eliminación quirúrgica: Consiste en cortar la piel tatuada.
- Abrasión salina: Se trata de lijar la imagen con sal.
- Láser: La imagen se borra con láser.
Se necesitan de 6 a 10 sesiones y los resultados no están garantizados. En ocasiones puede quedar mal. Por tal motivo, algunos recurren al cover up. El ‘cover up’ no quita el tatuaje, sino que lo camufla, a partir de crear otro tatuaje sobre él mismo, que lo enmascara.
(Fuente: centromujer)
Aunque no es fácil quitar un tatuaje, si que existen varias fórmulas y tratamientos, que todo hay que decirlo no son baratos, por ello se aconseja hacerlos de estos que puedan borrarse con el tiempo, los llamados henna.
A parte de costosas también pueden ser muy dolorosas. Razón por la que el henna hindú como alternativa al tatuaje convencional, es una opción que vale considerar, a la hora de tatuarse.
No obstante, si tienes un tatuaje y necesitas deshacerte de él, a cualquier costo, podrás optar entre diferentes alternativas. Para eliminar un tatuaje permanente recurre a alguna de las siguientes fórmulas:
- Eliminación quirúrgica: Consiste en cortar la piel tatuada.
- Abrasión salina: Se trata de lijar la imagen con sal.
- Láser: La imagen se borra con láser.
Se necesitan de 6 a 10 sesiones y los resultados no están garantizados. En ocasiones puede quedar mal. Por tal motivo, algunos recurren al cover up. El ‘cover up’ no quita el tatuaje, sino que lo camufla, a partir de crear otro tatuaje sobre él mismo, que lo enmascara.
(Fuente: centromujer)
Comentarios